Barranco de Trevélez

CONTRATA UN GUÍA DE BARRANCOS

• Actividad: Barranquismo en Andalucía
• Otras toponimias:
  • Río Trevélez, Río Guadalfeo (aguas abajo)
  • Cañón de Trevélez
• Punto de inicio: Aparcamiento C.H. El Duque
• Población más cercana: Órgiva
• Combinación de coches: no
• Coordenadas UTM de la entrada*:
  • X: 467917
  • Y: 4085412
• Horarios con un solo coche:
  • Tiempo aproximación: 1h20'
  • Tiempo de descenso: 2h20'
  • Tiempo de regreso: 15'
• Dificultad: v5-a5-V
• Rapel más largo: 26 mts. (Puente de Palos)**
• Cuerdas: 2x30
• Cartografía:
  • IGN
• Bibliografía:
  • Barrancos de Andalucia - 30 Descensos - David Prieto Plaza
    (Clica para comprarlo en AMAZON)
• Observaciones:
  • Es necesario valorar muy bien el caudal de este barranco, pues concentra muchos accidentes, algunos de ellos mortales. Recomendable material de reinstalación a principios de temporada. Muchas instalaciones están colgadas, recomendable llevar un pedal por si los que están en fijo se encuentran en mal estado o han desaparecido.

* Sobre las coordenadas de la entrada, a raíz de los accidentes recientes en el rápel de entrada del Trevélez, en 2022 el rápel original de acceso ha sido eliminado por las autoridades, si bien encontraremos un rápel de un natural con bastante rozamiento . Si seguimos el bancal donde estamos en sentido descendente del río, encontraremos la instalación para rapelar dentro del barranco y un poco más allá, todavía, unas cuerdas fijas para destrepar para acceder. En este sentido, las coordenadas son las correspondientes al rápel que hemos hecho nosotros, no a la entrada original donde estaba antiguamente el puente de palos que en forma de pasarela pasaban el río.

** El rápel más largo de 26 se corresponde al de entrada, pudiendo reducir la necesidad de cuerda a 2x20 si destrepamos o hacemos el nuevo rápel, unos metros más abajo.

CONTRATA UN GUÍA DE BARRANCOS

Desde la carretera A-44 tomaremos la salida número 164 que toma la carretera A-348 en dirección Béznar y sobre todo, La Alpujarra, pasando por Lanjarón. Llegados a Órgiva, cruzaremos el pueblo pasando frente al Teatro-Casa de la Ciudad, justo en una curva muy característica hacia la izquierda con unos semáforos. Justo después de este punto debemos buscar el desvío a la izquierda por la calle Profesor Lora Tamayo, el cual seguiremos hasta encontrar el desvío a la derecha con un letrero indicando Tijola - Agustines y El Duque, empezando en sentido descendente siendo la pista asfaltada GR-4202. Esta pista terminará sin asfalto, pero en buenas condiciones nos conducirá hasta el aparcamiento de la Central Hidroeléctrica el Duque.

APROXIMACIÓN AL BARRANC DE TREVÉLEZ

Desde el coche, desharemos la pista hasta encontrar el desvío que baja al río y una vez en el cauce de éste buscaremos el paso a nivel que lo cruza, para acercarnos al lomo de montaña que tendremos delante y que seguiremos por el camino de cabras, a veces muy desdibujado, muy cercano a una valla metálica que remonta también por el lomo de la montaña. En un punto poco concreto de la montaña, empezaremos a cruzar terruños, algunos con pasos delicados, en dirección unos escombros y unas plantaciones de almendros abandonadas. Nuestro objetivo es un collado muy característico, desde donde tenderemos al oeste por un antiguo camino, entrando ya en el valle del Trevélez. El descenso hasta el punto de acceso es un camino vertiginoso, poco definido en algunos tramos, y que conduce al punto donde estaba el Puente de Palos, ahora ya desaparecido, al otro lado del cual observamos restos de un antiguo camino que da heredad sólo de pensar cómo antiguamente la gente se movía por la zona.

EL DESCENSO DEL BARRANC DEL RÍO TREVÉLEZ

Iniciamos nuestro descenso a las instalaciones que hay unos metros más abajo de Puente de Palos, donde también algunos del grupo destrepan por las cuerdas fijas que permiten acceder al curso del río Trevélez.

Una vez dentro, quedamos maravillados del lugar, la belleza de esta garganta es inconmensurable, además, las aguas turbias y ferruginosas del barranco le dan un añadido al que estamos poco acostumbrados.

Iniciamos nuestro descenso y pronto encontraremos un pasamano a la izquierda que nos permitirá dar un salto (siempre compruebe, ya que nunca verá qué hay dentro del agua por su turbidez).

Seguimos el descenso por la estrechez con algunos pasos en oposición donde no cuesta demasiado imaginar la fuerza que puede tomar el agua en estos lugares. Río abajo, las paredes pierden un poco la altura y la sensación de garganta desaparece por unos minutos, aunque seguimos un pasillo bien excavado en la roca.

No tardaremos mucho en adentrarnos de nuevo en una buena garganta, ahora a través de un rapel al que accedemos por un pasamano equipado a la derecha del barranco y más allá llegar a un salto, en un punto bastante característico donde al fondo observaremos un pequeño bosque que se descuelga por la derecha desde media montaña hasta el río.

El próximo obstáculo nos obligará a hacer un destrepe muy delicado saltando a terreno duro, porque no hemos encontrado instalación para hacerlo con cuerda, un lugar con enormes bloques y una pared altísima a la izquierda donde buscaremos la reunión para rapelar por fuera del agua de nuevo, hacia dentro una garganta que gana profundidad entre las altivas paredes del Trevélez (cuidado con los rozamientos en este punto).

Seguiremos por buscar otro rápel casi de forma inmediata, de nuevo, a la izquierda del barranco, y como es habitual en el barranco de Trevélez, al final de un pasamano para evitar el activo. En este punto el barranco hace una vira suave a la izquierda, ya la derecha observaremos una gran cantidad de vegetación vistiendo un riscal por el que llora el agua. Al final de la curva del río encontramos un precioso rápel que con caudal alto puede presentar complicaciones en la recepción, pues se intuye que crea movimientos de agua; en nuestro caso, no será más que un rápel espectacular y muy fotogénico, la instalación de este rápel se encuentra plenamente colgada y encontramos un pedal instalado fijo para ayudarnos a liberarnos de los jefes de anclaje.

Río abajo, no muy allá y siguiendo una preciosa garganta muy estrecha encontraremos un nuevo pasamano a la derecha al final del cual veremos una nueva cabecera de rápel totalmente colgada.

El próximo rápel a la izquierda nos permite descender por debajo de un gran bloque empotrado, punto donde con caudal alto sería recomendable subirnos al bloque, y buscar a la derecha el rápel que nos permite evitar el activo. La garganta profundiza más adentro de la montaña y se estrecha, las paredes ganan enrojecimiento y el lugar nos hace estar embobados todo el rato, pero no nos desconcentramos, los rápeles se siguen sucediendo y ante nosotros ya nos encontramos con un nuevo rápel a cuya cabecera acceder mediante dos pasamanos, uno encima del otro separados por unos cincuenta centímetros y que nos deja en un charco donde el barranco gira bruscamente a la derecha para encontrar inmediatamente un nuevo rápel desde un abalakov directo a la roca . En este punto hay que tomar mucho cuidado en caso de caudal alto, pues justo antes del rápel hay un agujero en la parte izquierda del barranco que podemos no ver con mucha agua, pero podemos tragarnos agujero adentro.

Seguimos barranco abajo sin que éste pierda la estrechez, a no ser que aún gana más hasta llegar a la colada de sarro ferruginosa y enorme conocida como "la Catedral". Aquí el barranco se abre tímidamente, o mejor dicho, las paredes se separan la una de la otra, y pasaremos por debajo de un bloque empotrado gigante sobre el que vemos unos muros de piedra de construcción humana.

Proseguiremos por el río, encontrando algún salto al final de cuerdas fijas y que como siempre hay que comprobar para seguir un pasillo ya de cara a la gran colina que separa la Central Hidroeléctrica el Duque de su aparcamiento. Al final del pasillo quedaremos atentos a la derecha, buscando un camino viejo que nos lleva a unos restos de una acequia y más allá junto a la central hidroeléctrica, punto donde podemos saltar al último charco del barranco Poqueira, y aprovechar para limpiarlo lo todo del barro y hierro del Trevélez en las aguas limpias del Poqueira.

Retorno del barranco del Río TREVÉLEZ

Remontaremos el cauce izquierdo del Poqueira para pasar por detrás la central hidroeléctrica y la bordearemos por completo para cruzar el Poqueira por el puente que une la central con el túnel. Justo pasado el puente a la izquierda encontraremos un camino que bordea por la derecha el río que conforman ahora ya la unión del Poqueira y el Trevélez, y llegaremos en unos minutos siguiendo una antigua acequia en el aparcamiento donde tenemos el coche.